HORARIO

Centro veterinario desde el año 1983
HORARIO: Lunes a Viernes: 10:00 a 14:00 - 17:00 a 20:00 // Sábado: 10:00 a 14:00 // Domingo y Festivo: 11:00 a 13:00 -

Síguenos

03 diciembre, 2015

Cómo Jugar con tu Perro

Hay un dicho muy común “La familia que juega unida permanece unida” esta frase muy bien pudo inspirarse en las relaciones que unen a un perro con su propietario. El juego está en la base de una relación sana entre ambos. Jugar juntos puede incrementar el entendimiento y el respeto entre ambos, y ayuda a mantener a los perros bajo control.

A pesar de ello, pocos propietarios sacan verdadero partido el juego. De hecho, ni siquiera enseñan a sus perros a jugar como es debido: divirtiéndose mucho, pero siempre bajo control. Algunos piensan que jugar con el perro significa ponerse a cuatro patas y revolcarse con él; seguramente ambos disfrutarán mucho, pero para el perro tal vez no sea precisamente educativa esta actitud.

Los perros utilizan el juego para practicar las normas sociales que rigen en la vida real. Revolcarse con ellos puede ser sumamente divertido, pero les enseña a saltar sobre la gente que está tendida en el suelo. Imagine qué pasaría si un niño se cayese de un columpio y su perro se lanzase al instante sobre él. No hay que permitir que aprendan jugando conductas que serían malinterpretadas aen otro contexto o cuando usted no esté presente para controlar al perro.

Los Problemas con los Juguetes

Utilizar juguetes es una excelente forma de divertirse jugando, pero manteniendo al perro al mismo tiempo bajo control. No obstante, algunos propietarios tiene problemas para utilizarlos por dos motivos muy diferentes entre sí:que su perro no se interesa en absoluto por ellos o que se interesa tanto que, sencillamente no se lo devuelve.

Los juguetes pueden no interesar a un perro debido a su raza o debido a experiencias del pasado. Los chihuahuas, por ejemplo, carecen del instinto que hace a otros perros perseguir los objetos lanzados por su propietario y traérselos de vuelta.

Por otra parte, hasta un cobrador nato como el Labrador Retriever puede rechazarlos si las malas experiencias le han enseñado a asociarlos con dolor físico o reprimendas.

La obsesión por los juguetes es un problema mucho más frecuente. Ocurre a menudo cuando un perro ha descubierto que su buena forma física le permite vencer a su propietario: hacerse con el juguete lanzado puede ser divertido, pero quedarse con él y no devolverlo por mucho que se lo pida..bueno, eso sí es una experiencia formidable.

No caiga en la tentación de aceptar este comportamiento, porque corregirlo mejorará sus relaciones con el perro. Conviene insistir para poder disfrutar de largas horas de juego sano, con distintos juguetes.

Enseñarle a Jugar

Es relativamente fácil enseñar a un perro a jugar con juguetes.

-Elija un juguete especialmente atractivo para un perro, como un muñeco de trapo o de tela de saco.

-Déjelo en el suelo o agítelo en el aire en frente del perro. Normalmente éste se acercará de inmediato a olfatearlo.

-En cuanto el perro toque el objeto, emita el signo de aprobación elegido o haga sonar un clícker y ofrézcale una golosina.

-Repita este ejercicio hasta que el perro toque el juguete con el morro para obtener el signo de aprobación y el premio.

-Ahora, espere. Cuando el perro descubra que tocarlo no sirve ya para obtener la aprobación y la recompensa, probablemente pruebe a hacer algo más explícito, como agarrarlo con la boca. Tenga paciencia. En cuanto lo agarre con la boca, signo de aprobación y premio.

El Cobrar los Juguetes para usted.

Tal vez su perro sepa ya lo divertido que es perseguir y dar caza a los juguetes, pero prefiere quedárselo para él solo en vez de traérselos a usted. En ese caso puede recurrir a un truco de magia infalible: el del juguete doble. En primer lugar debe comprar dos juguetes idénticos que atraigan mucho a su perro.

-Lleve los dos al jardín o al parque. Arroje uno y deje al perro jugar con él durante un par de minutos. A continuación, llámelo. Si no vuelve con el juguete, tome el otro y láncelo hacia arriba en el aire repetidas veces haciendo mucho ruido pero sin prestar atención al perro.

-Normalmente los perros acuden de inmediato a ver qué pasa, dejando caer el otro juguete. En cuanto llegue a donde usted está, emita su señal de aprobación, y a continuación lance el segundo juguete. Recoja entonces el primero y repita el ejercicio. Así siempre estará usted en posesión de uno de los dos juguetes.

-Sea cada vez más exigente con el perro antes de emitir la señal de aprobación y lanzar el juguete que tiene usted en su poder. Puede empezar por pedirle que deje caer el juguete en sus pies, o que lo acerque a su mano sin soltarlo, como condición para tomar y lanzar el segundo.


Su perro no tardará mucho en cobrar los juguetes para usted y entregárselos de buena gana.


Por: Erik Farina (Etólogo Canino)

www.psicolmascot.com

Contacto: psicolmascot@gmail.com 

02 diciembre, 2015

La aptitud mental y física de su perro

La mente de un perro necesita ejercicio tanto como su cuerpo hace lo propio, "usarlo o perderlo" una filosofía que todos nos aplicamos. Por supuesto, adiestramiento es una gran manera de estimular su cerebro, pero no te olvides de las cosas puramente divertidas. Por ejemplo; los juegos interactivos y los juguetes desafiantes para pensar que a los perros de todas las edades les encanta jugar.

Con el fin de estar bien equilibradas las mascotas, los perros necesitan a diario tanto una estimulación mental como física. El deseo de "estar ocupado" está profundamente arraigado en la mayoría de los perros.

El trabajo, la caza, el pastoreo y las razas de guarda no son los únicos que tienen esta necesidad. Incluso las razas de perros pequeños retienen una cierta cantidad de ética de trabajo, por ejemplo, un Yorkie con lacitos en su pelo sigue siendo un perro, y sus propietarios saben que estos pequeños perritos siguen disfrutando de los comportamientos de tipo Terrier, como perseguir y cavar.

Si no se les da una salida para su energía, los perros de cualquier tamaño pueden llegar a ser destructivos, ansiosos o frustrados, causando numerosos problemas de comportamiento.

Conseguir el ejercicio que necesita su perro

¿Entonces cuanto ejercicio necesita realmente su perro? No hay una respuesta concreta, pero necesita bastante ejercicio para sentirse realmente cansado. La mayoría de los perros sanos se beneficiarán de las sesiones de ejercicio por la mañana y por la tarde. Un lugar seguro y protegido para el ejercicio sin correa es ideal, pero si usted no tiene acceso a esto, debes tener a tu perro en un área de 6 a 10 metros de largo, para mantenerlo a salvo y asegurarse de que él vendrá a ti cuando el ejercicio sea al aire libre.

A menos que su perro tenga una condición médica que requiere un ejercicio limitado, usted puede hacer por lo menos una de las salidas con su perro con una actividad aeróbica. El jugar con otros perros sin correa en un área cercada, nadar, jugar a buscar o correr al lado de un corredor o ciclista son excelentes ejercicios aeróbicos.

Si usted no tiene una zona al aire libre adecuada, puede entrenar a su perro corriendo en una cinta, a partir de tan solo unos minutos, poco a poco podrá trabajar hasta con una sesión de ejercicios de 30 minutos. El ejercicio de esta naturaleza libera endorfinas que tienen un efecto calmante sobre el comportamiento general de su perro, así como muchos otros beneficios para la salud.

Las Actividades seguras para el cachorro

Las actividades adaptadas para los perros adultos puede no ser seguras para los cachorros en crecimiento. El juego es la mejor opción para un cachorro, ya sea sin correa con otros perros, jugar a buscar u otros juegos con su propietario.

Correr o andar en bicicleta en el pavimento no son ejercicios seguros para los perros cachorros cuyos huesos no están completamente formados. Si usted tiene alguna pregunta acerca de si es o no un determinado tipo de ejercicio seguro para su perro, consultenos al correo; psicolmascot@gmail.com

Mantener a tu perro agudo

¡ No te olvides de la estimulación mental ! Las sesiones de entrenamiento deben mantener activo el cerebro de un perro, así como ayudar a desarrollar la relación apropiada entre el perro y el propietario. Usted debe tomar medidas para evitar los métodos aburridos o repetitivos, la formación puede incluir actividades tales como trucos o simples ejercicios de agilidad, incluso juegos. Las sesiones cortas de adiestramiento son las mejores, entremezcladas con sesiones de juego o el descanso.

También puede utilizar la hora de comer para que pueda gastar su energía física y mental. Ponga las bolas de pienso normales de su perro en un juguete diseñado para proporcionar una estimulación mental, como un juguete dispensador de alimentos.

Si no te importa un poco de limpieza, otra forma de agregar más diversión para el perro es poder coronar un juguete interactivo que ha sido rellenado con una papilla de pienso y golosinas y lo pone en el congelador. Una vez congelado, colóquelo en un papel (no de plástico) bolsa con un palo de morder y una golosina o dos. A los perros les encanta esta manera de diversión de trabajar por su comida y en el proceso se gasta más energía, contribuyendo así a asegurar un mejor comportamiento del perro.

Por: Erik Farina (Etólogo Canino)

PSICOLMASCOT

Contacto: psicolmascot@gmail.com 

01 diciembre, 2015

Los Perros de Compañía

Este grupo engloba razas muy diferentes entre sí, pero difícilmente clasificables en cualquier otro grupo. Su aspecto y origen geográfico varían enormemente, y su talla puede ser tan reducida como la del Spaniel Tibetano o tan enorme como la de gigantesco Leonberger. En general, todos suelen estar a sus anchas en el entorno doméstico, si bien no todas las razas son adecuadas para cualquier tipo de casa o familia.

Hay quien prefiere denominarlos “perros no deportivos” o “perros especiales”, ya que muchos se criaron para desempeñar funciones muy diversas entre sí pero distintas de la raza, el combate y demás trabajos típicos de los perros (como por ejemplo calentar camas imperiales, entretener en los salones palaciegos o ser mascota de las damas).

Los que no se criaron como perros de lujo o de salón realizaban labores ya inexistentes, y como ya no pueden considerarse perros de trabajo, han pasado a formar parte de este grupo heterogéneo (el Bulldog, por ejemplo, fue un perro de combate utilizado para luchar a muerte con los toros cuando aún era legal ese cruel espectáculo y actualmente es un perro de compañía).

Tipos de Perros de Compañía

No hay uniformidad de criterios a la hora de clasificar en este grupo a una raza. El Akita Japonés, por ejemplo, se considera perro de compañía en el Reino Unido, pero se clasifica como perro de trabajo en los Estados Unidos.

Este grupo integra algunas de las razas más bellas, inteligentes y preferidas como mascota en todo el mundo, y también algunas de las más antiguas. El pedigree de muchos se remonta a un pasado remoto, y el origen de no pocas razas está ligado a una historia exótica y fascinante. El Lhasa Apso, por ejemplo, vivió siempre en los templos tibetanos, porque se creía que los Lamas que no lograban alcanzar el nirvana se reencarnaban siempre en un perro de esta raza. El vigoroso Dálmata, por su parte, corría a la par que los caballos de tiro, como escoltando los carruajes y su carga.

El Chow Chow se originó hace miles de años, y fue el perro de caza de los nobles en la China Imperial. El Akina Inu, criado originalmente en Japón como perro de combate y para abatir animales grandes y feroces, como por ejemplo el oso negro, fue declarado patrimonio nacional en su país de origen.

Todas estas razas son en la actualidad popularísimas mascotas y asiduas participantes en los concursos de belleza y exposiciones caninas. Una de las más típicas es el Caniche, descendiente de los Retrievers o Cobradores de agua alemanes. Muy popular es también el Bulldog, desde hace mucho liberado del cruento espectáculo para el que fue creado y convertido en símbolo nacional ingles.

El llamado Terrier Tibetano no es en realidad un Terrier o ratonero, sino un perro de pastor, pero no puede clasificarse como perro de trabajo por haber sido adaptado a las funciones de perro de compañía y carácter del vigor y la corpulencia de los demás perros de pastor y de trabajo en general.

El Spaniel Tibetano, por su parte, no se incluye tampoco como los otros Spaniels entre los perros de muestra, cobro y de aguas, ya que nunca se dedicó a hacer levantar la caza a la intemperie, soportando el frío y la humedad, como los demás Spaniels. Emparentado con el Pequinés, su trabajo consistía en aguantar pacientemente horas y horas bajo la túnica de un monje, convertido en algo así como una manta eléctrica viviente.

Últimamente este grupo se está incrementando a gran velocidad a causa de los nuevos cruces entre razas, algunos ya tan populares en las Islas Británicas, por ejemplo, poseen ya nombre y se cree que pronto serán reconocidos como razas independientes por el Kennel Club, concretamente el Cockerpoo, cruce de Caniche y el Pekepoo, cruce entre Caniche y Pekinés. El Kennel Club Holandés ya ha reconocido oficialmente a los Markiesje, nueva raza procedente de un cruce entre el Caniche Toy y un Épagneul o Spaniel no británico. Otro cruce muy popular en el Reino Unido es el Labradoodle, mezcla de Labrador y Caniche Estándar.

El Cuidado y el Mantenimiento

Finalmente, los perros englobados en este grupo, a pesar de ser todos de compañía y sentirse muy unidos al propietario por general, no siempre son la mascota ideal de cualquiera. El Akita, por ejemplo, es una raza muy independiente, totalmente inadecuada para un propietario sin experiencia. En cuanto a los cuidados higiénicos y estéticos y la necesidad de ejercicio físico, la enorme diversidad entre las razas nos impide ofrecer consejos de tipo general. Si está pensando en adquirir un perro de alguna de estas razas, será mejor que pida a un experto que le asesore.

Por: Erik Farina (Etólogo Canino)

www.psicolmascot.com

Contacto: psicolmascot@gmail.com